Salgo de Cáceres sobre las 19:00 horas del día 18 de Julio, llego a la plataforma sobre las 21:00 y a caminar entre dos luces, para llegar sobre las 23:00 a la laguna, busco un buen lugar para vivaquear y a dormir.
A la mañana siguiente, desayuno en el refugio Elola y sobre las 08:00 de la mañana comienzo la caminata bordeando la laguna por su parte izquierda, hay que ir pendiente de los hitos, ya que hay que empezar a subir girando a la izquierda y puede uno seguir desviandose de la ruta.
Las cabras montesas no se resisten a darnos los buenos días y nos acompañan en un trecho de subida, subida larga pero con buen sendero hasta llegar al collado, donde en la bajada hay que volver a guiarse por los hitos.
Una vez en la laguna superior, giramos a la izquierda y nos enfrentamos a un muro de rocas que se afronta por la parte izquierda, para continuar por más y más rocas, teniendo siempre como referencia la Galana.
Llegamos a los neveros, vamos sin crampones, así que vamos buscando las rocas, menos mal que ya está avanzada la mañana y al cruzarlo, la nieve ya está blanda y con cuidado lo pasamos, pero en la canal que nos lleva al collado hay demasiada pendiente y optamos por coger la canal que lleva directamente a la brecha de la galana.
Comenzamos el descenso desde la Galana de vuelta a la Laguna grande, alta temperatura que invita a darse un baño en las pozas que encontramos en el camino.
Exigente ruta pero muy bonita y recomendable para un buen día veraniego.
